jueves, marzo 15, 2007

CRÓNICA 7: Lugares comunes... 2, continuación

Segundo lugar común:

En un baño de mujeres de una fiesta que celebra a “mujeres que aman a otras mujeres”, los celos femeninos se presentan orgullosos, erectos y húmedos:

Escena 1
Mujer joven encolerizada: “¿Creís que soy hueona?”.
(combo en el hocico a una mina cualquiera que se besa con la mina de la mina encolerizada por sus celos –es que la quiere tanto, que le pega. Hay que respetar la institución del pololeo, del noviazgo, de la pareja pues!).

Escena 2
La encolerizada: “¡Ya!, nos vamos pa’ la casa” .
( la mina “besada”, que es la mina de la mina encolerizada, después de una merecida patada sigue a su ama, que ama, fuera del baño. Muda, mudita, callaita, no diga na’ mija linda no le conviene, si ya se sabe el libreto. Repítelo, repítelo… por amor, por posesión).

Escena 3
La encolerizada: “¡¿Te gusta esta hueá?! ¡¿Te gusta esta hueá?!".
( la mina encolerizada, de nuevo. Ahora esparce su terror en alguna parte de la fiesta mientras increpa a “su” mina, “su” pareja, amiga y amante “su” lugar, fantástico, en el mundo. Visibiliza, así, qué es ser mujer).

Escena 4
La encolerizada: “¡Defiéndela ahora po’! ¡Defiéndela!”.
( la mina encolerizada, de nuevo. Ahora ejecuta una encerrona magistral a una mina cualquiera que quiere salir cuanto antes del lugar. La misma mina cualquiera que se besaba con su mina –que, entre nos, la joteó, la joteó, la joteó… y de cansada, y caliente también, la mina cualquiera cedió -No, si no le ha bastado la experiencia con los pastelitos… Ahora va y atina con la mina más lacha y celada del local. Se lo buscó pues mijita, qué quiere que le diga).

Escena 5
La mina cualquiera logra evadir la vigilancia de la mina encolerizada y se va de la fiesta un tanto asustada, aunque recuerda que conoce casos similares de violencia amorosa entre mujeres. Y de pronto, todo se revela: ha terminado por ver todos los despliegues del patriarcado, incluso aquel, el más sofisticado por intocable: el Amor= dispositivo patriarcal. Patriarcado= dispositivo amoroso.

Dentro del local la fiesta continúa sin problemas, la mina besada le baila a su mina celosa para olvidar el mal rato -ay, que se me pone celosita, preciosa si te quiero a ti no más, tontita… Nunca más, nunca más. Promesa-, después de todo la culpa fue suya por calentona.
Y así, pueden seguir amándose tranquilas por los siglos de los siglos amén amen amen amen amen amen amen amen amen amen amen amen amen amen amen amen amen amen amen
amen amen amen amen amen amen amen amen amen amen amen amen amen amen amen

Ahhhh ¡tanta intensidad!
¡Ja!
lugares comunes no más…

(continuará)

miércoles, marzo 07, 2007

CRÓNICA 6: Lugares comunes... 1.

Primer lugar común:

Tenso la mandíbula y mi lengua
se dispara
contra él, objeto de mi afecto.
Grito fulminante de un ataque de celos.
Mi ataque, mi dolor:

“¡Te acordái de mi!
¡Ah, ah, ah!
Oye, ¿¡te acordái de mí…!?
¿Te acordái de mí?
Sí po’, mírame, mírame,
¡sí po’, si viniste conmigo!
CON-MI-GO”

Agarro un pedazo de tu piel y lo estrujo entre mis dedos.
De esto, claro, yo recuerdo muy poco, casi nada…

“No era yo”, invento.

Perdóname ámame mírame háblame escúchame tócame pruébame
Perdóname ámame mírame háblame escúchame tócame pruébame
Perdóname ámame mírame háblame escúchame tócame pruébame
Perdóname ámame mírame háblame escúchame tócame pruébame


Cubro mi cara con mis manos y sollozo:
“Que vergüenza, que vergüenza.
Es mi culpa, es mi culpa”
De esto, claro, yo recuerdo muy poco, casi nada…
“No era yo”, invento.


Segundo lugar común:

En un baño de mujeres de una fiesta que celebra a “mujeres que aman a otras mujeres”, los celos femeninos se presentan orgullosos, erectos y húmedos.
(continuará...)